No podemos evitar envejecer y tampoco que los signos de la edad se noten en nuestra piel, pero podemos ralentizar el envejecimiento y para ello las cremas hidratantes antiarrugas son un buen aliado.
El envejecimiento de nuestra piel tiene que ver con diferentes factores: la genética, la alimentación o la exposición al sol. La genética no la podemos cambiar pero una buena alimentación, con abundancia de frutas y verduras, y una adecuada protección de nuestra piel ante los rayos solares son elementos claves para evitar las arrugas, al igual que optar por tratamientos anticelulíticos. También es muy importante beber mucha agua para tener el cuerpo (y también la piel) perfectamente hidratado.
Si a ello añadimos el uso diario de una buena crema hidratante antiarrugas frenaremos considerablemente el envejecimiento. Estas cremas activan el colágeno y la elastina de la piel, con lo que, si se usan con regularidad, retrasan la aparición de las arrugas y reducen las que tenemos.
¿Cuándo debemos empezar a utilizar cremas antiarrugas?
Con la edad empezamos a notar que nuestra piel no está tan tersa, ha perdido su brillo y empiezan a notarse mucho las líneas de expresión. Esto sucede porque la renovación celular se vuelve más lenta lo que suele pasar en torno a los 25 o 30 años (antes si has castigado mucho tu piel). Este es el momento de empezar a usar una crema hidratante antiarrugas.
Hay que tener claro que el resultado no es instantáneo por eso es muy importante usarlas regularmente y tener constancia. Si se usa una buena crema antiarrugas combinada con un buen protector solar a diario podemos retrasar el envejecimiento de nuestra piel unos 10 años. También es recomendable exfoliar la piel una vez por semana porque así eliminamos las células muertas que se han acumulado sobre nuestra piel y la preparamos para absorber bien las cremas. Eso sí: hemos de ser constantes, si no estaremos perdiendo el tiempo y no notaremos ningún resultado.
¿Hay diferentes tipos de cremas antiarrugas?
Sí. Para empezar debes averiguar cuál es tu tipo de piel:
◦ Hay cremas hidratantes antiarrugas para pieles grasas y para pieles secas.
◦ Las que son para pieles grasas suelen ser más ligeras y ayudan a controlar la producción sebácea, como es el caso de las cremas antiarrugas a base de gel.
◦ Las cremas para pieles secas son más cremosas, con más grasas para hidratar más la piel.
◦ También hay cremas antiarrugas para pieles sensibles o alérgicas, son las cremas Bio, que utilizan ingredientes naturales y no suelen llevar conservantes.
¿Qué ingredientes debe contener una buena crema antiarrugas?
Hay muchas cremas hidratantes antiarrugas y cada una puede tener unos ingredientes diferentes, pero hay algunos que no pueden faltar para que la podamos considerar una buena crema:
- Cobre: favorece la producción de colágeno.
- Coenzima Q 10: es un nutriente que regula la producción de energía de las células.
- Cinetina: favorece la eliminación de las arrugas y de las manchas de la piel.
- Ácido hidroxi: eliminan las células muertas y regeneran la piel.
- Retinol: es un antioxidante muy importante sobre todo para el rostro.
Las mejores cremas hidratantes antiarrugas son las que tienen estos ingredientes porque favorecen la hidratación de tu piel y le aportan firmeza y flexibilidad.
¿Cómo me pongo la crema antiarrugas?
Las cremas antiarrugas deben aplicarse con la cara lavada y bien seca 2 veces al día, una por la mañana y otra por la noche. Has de ser constante en la aplicación para que produzcan los efectos esperados.
Las cremas antiarrugas no se ponen como cualquier hidratante sino que para mejorar su efectividad es mejor que sigáis estos consejos:
Para aplicarse una crema hidratante antiarrugas hay que seguir la dirección contraria a las arrugas de forma que la crema entre bien en la piel y hay que utilizar las dos manos.
Por ejemplo, para las arrugas de la frente que son horizontales hay que aplicarse la crema de forma vertical y ascendente, desde las cejas hasta el nacimiento del pelo. Para las arrugas de los pómulos hay que empezar por la parte inferior del pómulo hasta la sien. En la parte superior del labio hay que ponerse la crema de forma horizontal desde la parte central hacia fuera. Las arrugas del cuello son horizontales como las de la frente, por tanto, hay que aplicarse la crema de forma vertical pero en sentido descendente, desde la barbilla hacia el escote.
Si aplicas la crema antiarrugas siguiendo estos pequeños consejos será más efectiva puesto que estiras la piel y haces que la crema llegue a todos los rincones.
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